Sencillez, musicalidad, ritmo, amor a la naturaleza, infinita soledad y tristeza están presentes en Pinceladas de espuma. Otros temas principales, la mujer y la muerte, entran en este baile de poemas y, sobre todo, ese final, ese remate de la poesía tan difícil de igualar.
En la obra que hoy nos trae Eduardo bajo el brazo (donde lo real se funde con lo imaginario), además de dedicatorias de todo tipo —en las que se plantean y ensalzan diferentes temas y valores—, encontramos asuntos relacionados con la escuela y la enseñanza, cuestiones varias relativas a su centro y una serie de propuestas explícitas e implícitas. Para dar forma a esta temática —y problemática—, Castaño, estructurándola tripartitamente, se sirve tanto del verso (dedicatorias) cuanto de la prosa (presentaciones, exposiciones, informaciones) y el diálogo (comentarios, opiniones, análisis). Es la primera vez que el autor de Faulora y el hombre utiliza estos tres vehículos juntos en una obra, algo que convierte a I.E.S. Parque Aluche (Memoria) en un libro singular y distinto dentro de su trayectoria literaria.
B. G. Aphus
Azul y oro y Diario suspensivo son dos obras independientes reunidas en un mismo libro. Esta edición que presentamos en nuestra colección Incipit es la primera publicación de este joven autor.
Al aire del Guadarrama. I. Antología Poética es el primer libro con el que su autor empieza esta serie. Admirador de P. Gratry y de Zubiri, en teología considera como sus maestros a Rahner y Ratzinger, y en política a Metz. Con Al aire del Guadarrama, Juan Castrillo rinde un bonito homenaje a personas y paisajes que le han acompañado en gran parte de su vida.
Quiero viajar a Pólux se nutre de tres poemarios: “Latidos y plumas” (la introspección); “Página del tiempo” (la ciudad habitada y sus gentes) y “Como si las nubes” (Tengo un poema azul, que quiere ser más que un color, que quiere ser más que azul y un poco de pájaro).
El Pequeño cancionero de Cangas del Narcea, especialmente dedicado a su madre, Carmen Rodríguez Gutiérrez (que en paz descanse), es también una pequeña ofrenda o tributo que el autor quiere rendir no sólo a su villa natal sino a todo el concejo de Cangas del Narcea, tan grande y hermoso, por cierto. Canto alegre y sentido de la tierra, canto que, tanto implícita como explícitamente, es una clara muestra de afecto y gratitud hacia su pueblo y sus gentes, con quienes siempre se ha sentido muy a gusto y plenamente identifi-cado. Conviene señalar, no obstante, que el carácter localista de la obra no impide en muchos casos que un lector no familiarizado con el texto y el contexto de los poemas pueda entrar en ellos, comprenderlos y, si cabe, disfrutarlos casi tanto como un lector avisado.
Con un poemario maduro, intencionado y, a pesar de las apariencias, profundamente serio; con un trabajo que rezuma vigor, libertad y compromiso; con una obra donde “Es conveniente blanquear esta pasta/ Interna mía” (poema nº 2), vuelve al ruedo lírico el asturiano Castaño Rodríguez.
Pasados los años ochenta, década privífera, porrífera y follífera por excelencia, realmente inolvidable para algunos que tuvieron la suerte de vivirla en su juventud (en Eduardo coincide con sus 22-32 años de edad); pasados, digo, estos años de rock —¡ oh bendición!—, llegan los “post-eighties” y llega el vértigo del siglo veintiuno; llega Faulora y el hombre.
…Semillas de un sueño, que sutiles manos sueltan al azar agarrándose a suelos áridos. Diminutos brotes de una flor que asoman tímidos al corazón y son aplastados por la realidad…
Los protagonistas de esta historia hacen un recorrido por el paraíso de la ilusión, en el Camino de Santiago, para desembocar en las tinieblas del desamor, cuando interfieren las desavenencias de sus circunstancias externas…
Eugenio Álvarez Gálvez es natural de Madrid, ciudad en la que cursó estudios de Medicina. Especialista en Psiquiatría, ha simultaneado su actividad profesional con su vocación literaria. Su obra poética trata de ahondar en el complejo mundo de los sentimientos para intentar descifrar alguna de las contraseñas de la existencia humana en un universo tan escéptico y desesperado como tierno y pleno de valores profundamente humanos, repleto de ferviente y rica soledad y transido de una resignada melancolía.
Son también obras del mismo autor Naturaleza muerta, Círculo de ausencias y Un instante más… publicadas en esta editorial.
A lo largo de Poesías de amor, vida y muerte, la autora nos abre las puertas de su corazón y da cabida a sus más hondos y profundos sentimientos. Entre ellos los que, sin duda, considera esenciales para todo ser humano: el amor, la vida y la muerte.
A través de estos poemas, que se basan en motivos e imágenes familiares y reconocibles para cualquiera, el lector entra fácilmente en el mundo de sensaciones que recrea la autora, con el que se siente totalmente identificado.
Desde la percepción íntima del dolor propio y ajeno, hasta la captación esperanzadoramente aséptica de lo que sucede en nuestro entorno, pasando por la exaltación y el gozo de compartir las sonrisas que nos rodean, todo eso es lo que ha cristalizado en poemas, los que ahora tienes en tus manos. La vida es larga, espero, y tiene para todos, sólo hay que saber reconocer el momento y atraparlo. Lo que hagamos con él depende de cada uno.
Poemario sobre la vida, lo natural, lo cotidiano. Lírica sencilla, sin grandes artificios pero capaz de conectar con el lector porque nos habla de lo que es esencial y común en la existencia de todos los seres humanos: lugares, personas, sentimientos y recuerdos; temas en los que se respira la calma de quien se encuentra en armonía con el mundo.
